Debido a genética y condiciones climáticas, la piel es un órgano con diferentes características en cada raza. Te contamos sobre la piel de las latinas:
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Las mujeres con un tono de piel más oscuro tienen dificultades para absorber suficiente vitamina D del sol, elemento crucial para los huesos y prevenir la osteoporosis. Asegúrate de consumirla en atún, salmón, lácteos y cereales.
Se tiende a pensar que una piel más oscura será más resistente al sol, pero no es así. Los daños de los rayos solares pueden tener consecuencias nefastas y en su mayoría provienen de la exposición diaria y no sólo de quemaduras más serias, como las que obtienes cuando tomas sol. Por ello, sin importar el tono de tu piel, cuídala de los rayos UVA y UVB.
Directamente relacionado con el punto anterior, las latinas somos más susceptibles a generar melasmas o manchas en la piel, que aparecen en las zonas más expuestas. Por eso, insistimos, no dejes de usar protección solar! |
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Los queloides y cicatrices hipertróficas son más comunes en las latinas que en otras razas, por lo que debes tener cuidado con las lesiones en la piel, incluyendo estrías y espinillas. Recuerda usar bloqueador para que los rayos del sol no acentúen sus consecuencias.
Las latinas requieren menos retin-a, un retinoide derivado de la vitamina A, elemento utilizado para combatir manchas, arrugas, acné y que aumenta el colágeno. Se recomienda usarlo de noche puesto que de día puede acentuar las manchas debido a su efecto exfoliante. Por ello, si te lo receta tu médico, ten en cuenta que las latinas requieren una dosis relativamente baja.
La celulitis es un problema común y que afecta con mayor frecuencia a las latinas. Este es un fenómeno a nivel regional ya que nuestra dieta contiene muchas grasas saturadas, frituras, harinas y azúcar. Deporte y una buena alimentación son tu mantra!
